Aconsejamos que se conserve en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar directa. Consumir preferentemente antes de 6 meses desde la fecha de expedición , manteniendo siempre las condiciones de conservación. Una vez abierto, consumir antes de 15 días.

Te recomendamos no consumir el producto frío para que no pierda sus cualidades organoépticas. Una vez que tengamos a la temperatura idónea… ¡A disfrutar!